¿CONFINADOS O CONFITADOS?..
Queridos colegavirus, ¿cómo llevamos el confinamiento?.. Yo contestaré como aquellas cartas que le escribía a mi abuela para un hermano que tenía fuera de su tierra y de su tiempo: “ espero que todos gocéis de buena salud… yo quedo bien, gracias a Dio s”… Pues eso mismo, que quedo bien gracias a Dios… o eso espero. Porque, al igual que las cartas de mi abuela, cuando escribo este artículo no es cuando ustedes lo van a leer, y en ese “intermezzo” pueden ocurrir muchas cosas. Ahora ya no se escriben cartas, como antes, con un intervalo para la imaginación y la esperanza. Ahora se escriben emails, whatsapps y Sms, que son instantáneos, como el café, no muy meditados, al contrario que aquellas cartas que se pensaban línea a línea, frase a frase, con una paciencia, filosofía y dominio del tiempo del que hoy carece… Y es que para pensar se necesita tiempo. Si no hay tiempo, el pensamiento no madura. Y un pensamiento verde, prematuro, si se coge sin madurar, co