Datos personales

Mi foto
TORRE-PACHECO, MURCIA, Spain
Escribidor, más que escritor, empresario, Juez de Paz de mi pueblo, colaborador de la fundación Entorno Slow, certificado por Global Reporting Initiative como técnico para sellos RSC - Responsabilidad Social Corporativa -, vicepresidente de COEC (Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales) y presidente local, tonto útil, etc...

lunes, 31 de julio de 2023

NO SÉ SI ME EXPLICO...

 

(de Les Dokimos)

Alguno(a)s me dicen que en muchos de mis artículos ataco a la Fé… Lamento tan falsa interpretación, pues el universo, la Historia, todo, para bien o para mal, se mueve por la palanca de la fé.

Yo no niego la Fe, en modo alguno. Lo que planteo es un par de cosas: en primer lugar que reflexionemos sobre nuestro concepto de la fe; y en segundo lugar que busquemos muy bien dónde y en qué depositamos esa fe. Solo eso.

A nosotros se nos mentaliza y se nos imbuye una idea de fé determinada y teledirigida a un objetivo concreto, excluyendo una libertad de pensamiento y conciencia que es vital para construir la auténtica y genuina Fé… ¿Qué fé o no fé?.. esa es la cuestión.

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

domingo, 30 de julio de 2023

DE PROFESIÓN...

 

Nuestros mayores (hablo de los míos y de mi generación, claro) cuando hablaban de asegurar el futuro de sus hijos, solían pensar, por lo general, en profesiones, no en carreras… o entre “ponerles un estanco”, para lo cual se precisaba de un potente padrinazgo y/o haber hecho méritos en guerra, no vayan a pensar que vendía tabaco – se decía expendía, pues en el letrero ponía “expendeduría” – o hacían lo posible para, por medio de esos valedores, si cabe más altos y potentes, meterlos a funcionarios (pocos, muy pocos había entonces)… En ambos casos, como en muchos otros, el “tener padrinos”, aparte los de pila, por modestos que fueran, era tan casi necesario como poseer un par de buenos zapatos: no se podía andar por la vida sin tener a mano a “alguien bien relacionado”, o con “conocencias” suficientes para un buen quite.

En la actualidad, el panorama ha cambiado un tanto, si bien en lo segundo, no tanto… El nepotismo funciona hoy casi más que ayer, a mayor revoluciones si cabe, y lo de que “una buena capa todo lo tapa” sigue tan vigente, o más, que entonces. De “los tiempos del cuplé” a los del canapé, solo ha pasado eso mismo: el tiempo. Es verdad que había que prepararse en saberes y conocimientos, cierto, pero sin padrinaje no había bautismo. Ahora tengo mis dudas si lo segundo prima sobre lo primero, o no. Ustedes sabrán, si lo saben…

Lo que sí ha cambiado es la oferta de trabajo, y muchas veces incluso se ha montado la cualidad sobre la calidad. Por ejemplo: se coloca antes un fontanero que un ingeniero… Los oficios, conforme pasan los calendarios (calendario viene de calendas) se cotizan más que las carreras, por término general y salvando, claro está, algunas excepciones que vienen a confirmar la regla, como, por ejemplo, las científicas y las informáticas, y tampoco todas. Una muy demandada, fíjense qué cosas pero es la pura verdad, es la de guionista… Debe ser porque cada vez hay más millones de gentes enganchadas a las vidas ajenas de serie, aún sabiendo que son embustes prefabricados, y aquí tira la demanda de la oferta, como toda ley de mercado. Y, por favor, perdónenme que utilice “gente” y no “persona”, pero es solo porque el fenómeno es de gentificación, y no de personalización, aún más lejos queda la personalidad.

Otro oficio, sin serlo realmente en puridad, es la política, que ha pasado de afición a profesión, y de ésta a profusión. Se puede calificar de profesión, pero yo creo que la verdad de verdad es que es una ocasión, una salida, una oportunidad de las que antes se decía que la pintaban calva… El ganar un espléndido sueldo, privilegios, gabelas y demás pelendengues añadidos, aparte del poder, es enormemente atractivo. Por eso los aprovechados y cuentistas, no se necesitan muchos escrúpulos, acuden en aluvión a hacer, o a deshacer, política.

Una persona amiga a la que respeto, bastante más joven que yo, que ha abandonado la política de mediano tonelaje tras muchos años de ejercicio, me confiesa que una de las razones es por “la cantidad de advenedizos que están aterrizando”… Y otros hay que vuelven al camino, porque se sienten obligados – y me consta – a restituir a la política el buen hacer olvidado y la dignidad perdida, aunque, personalmente, y pido disculpas, yo ya no creo que eso sea posible. Sí creo que ellos son de esas pocas excepciones que vienen a confirmar la regla. Es tal la enormidad de mediocres, desconcienciados y paniaguados, sinvergüenzas y trileros de oficio, que ya no se puede limpiar el atrio del templo ni con látigo… La prueba del algodón es que cada vez se hace menos política, pero hay más políticos. Eso es porque la política ha desaparecido y se ha instalado la demagogia.

La otra vertiente de esto es que esa clase, mal-llamada política, trabaja cada vez más para las oligarquías económicas que nos ordeñan, que para el propio ciudadanaje de companaje. Lo primero es imponer sistemas deseducativos que logren una sociedad muy competitiva entre ella, pero privada de valores humanos y enfocada al tener y al disfrutar sin miedo a las consecuencias, que ocultan en lo posible como “buenos mandaos” que son. Así se pueden desarrollar sutiles políticas negativas como si fueran positivas. Un ejemplo-detalle, entre otros, es abrir colegios, guarderías y otros durante las vacaciones estivales. Se le pone la etiqueta de “conciliación familiar”, cuando, en realidad, es conciliación laboral, pues solo se beneficia la producción empresarial a costa de “colocar” a los críos en lugares ad-hoc para que no anden por en medio… bien para poder trabajar o bien para poder holgar sin ellos a cuestas.

Incluso Díaz Ayuso, de opuesto catecismo, lo adopta y lo adapta, pero sin disimulos ideológicos ni escatológicos, tan solo que estratégicos. La cosa es que los zagales no estorben, que estén transferidos el máximo tiempo fuera del ambiente familiar para que sus padres puedan trabajar de camareros, y a la vez llenar las terrazasss de su Madrizzz… Pensemos lo que pensemos, o como pensemos, lo que sale perjudicado siempre es la relación y el vínculo familiar, la unión y convivencia entre padres e hijos. Cambiamos humanismo por hedonismo.

Sin duda, el oficio político es el más rentable. Con cuatro años trabajados da para engordar una buena cartilla de ahorros… y de jugosas relaciones. Si su puesto es de los pisos superiores, les queda un “retiro” en el tiempo que muchos quisieran. Si has servido bien, puedes hasta cosechar el agradecimiento de las grandes empresas con un suculento, aúnque inútil, puesto en sus consejos de administración, o en cualquier otro derivado chollo. No es de extrañar que se apuñalen en los riñones por conseguir arrimarse al trono. Y, encima, no hay que estudiar en ninguna facultad, salvo que sea para acaparar títulos y máster´s de engrase para el pase; ni hay que hacer más oposición que tomar posición: jurar la bandera del partido y arriar el calzón ante el líder.

Lo que cada vez se hace más necesario es prepararse para ser persona, y no gente. Para no dejar de ser humano pensante… para no dejarse adocenar y ser un productor-consumidor más del panal. Para ser librepensador y liberarse de la tiranía que se nos impone a través de nuestra ignorancia por “la fidelidad a las ideas”… ¿qué ideas?.. Solo nos quieren como autoasumidores y autoconsumidores, nada más… Se trata de que no nos enfrenten a nosotros mismos entre nosotros mismos para facilitarles a ellos el “bajo palio” que persiguen, y que luego usan para sus intereses y no para los nuestros… Se trata, en definitiva, de SER, no de ESTAR…

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

viernes, 28 de julio de 2023

EN INTERÉS DEL ENGAÑO

 

(de elcato.org)

Hay mucho cuento en la política. Y mucho ocultamiento, y mucha pose y mentira. Solo un par de ejemplos, aunque sé que la grey domesticada me los rechazará:

Si en la Región de Murcia no se quiere que Vox condicione el buen gobierno de la Comunidad, solo tienen que abstenerse un par del PSRM… Si en España se quiere alejar el fantasma de ultras y separatistas, solo hay que hacer un gobierno de coalición entre los dos partidos más votados…

Se demuestra que a nuestros políticos les importa menos el interés del país y de sus ciudadanos que sus propios y bastardos intereses de partido… Mientras, nos arrastran ideológicamente a pelear por ellos.

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

jueves, 27 de julio de 2023

VIVIR

 

(de La Razón)

Cinco letras apenas para expresar un significado tan denso y tan amplio, tan contundente y tan compacto, tan profundo, tan corto y extenso a la vez… Vivir reúne apenas un par de sílabas iguales, repetidas, y una “r” final a modo de infinitivo verbal, aunque en este caso precisamente, el infinitivo puede volverse infinito. Y pudiera ser porque vivir la vida, ¿qué, si no?, bien puede llevarse todo el infinito en el intento. Piénsenlo, piénsenlo ustedes, pero piénsenlo despacio, “a bonico”…

Lo primero que deberíamos preguntarnos – pues sin vida nada habría que preguntar ni vivir – es qué es eso precisamente: la vida: si un mero respirar (pneuma), si un mero existir (psyquis); si un mero experimentar (empeirá); o quizá sean las tres cosas en una sola, como una trinidad. O puede que todas formen parte de la vida, pero que cada una por su lado sean vidas incompletas… La cultura griega ya exponía en sus ágoras las diferentes escuelas de pensamiento, que, al igual que la idea de la vida, eran tan distintas como a la vez complementarias.

Hasta las piedras viven, aunque eso no lo creamos vida”, creo que decía Anaxágoras por lo bajini… y llevaba razón. Porque estos filósofos, que basaban sus razones en la mera observación, no se desviaban mucho de la experimentación realizada muchos miles de años después. Pensadores antes, y científicos ahora, no andan tan descaminados los unos de los otros. “Que yo razone y el pedrusco no, solo quiere decir que ambos vivimos, pero que el pedrusco no se da cuenta que vive”, decía Pitágoras a sus oidores…

Al final, entre unos y otros de la misma escuela, fijaron un axioma indefectible que ha llegado hasta hoy: “si nace, cambia y muere, es que vive”. Inapelable. Solo la física quántica, milenios después, se ha permitido añadir que, cuando nosotros dejamos de percibir tal fenómeno, no quiere decir que desaparece, sino que sigue funcionando a otro nivel o dimensión vibratoria, porque la muerte y la vida son dos palabras que definen la misma cosa (los más espabilados y avisados habrán observado ya que he quitado el elemento “religión” de la ecuación, pero es tan solo para poder demostrar que no se necesita para explicarlo). Forgive me

Así que, si queremos hacer un análisis personal cada uno de nosotros de su experiencia de VIVIR, está claro que tan solo puede hacerlo de su vida consciente en este mundo, en esta parcela de existencia, ya que de otras anteriores (ni Dios tiene principio ni fin, ni la energía se crea ni se destruye pues tan solo se transforma, pertenecen al catecismo Ripalda y al de la Termodinámica) no se nos ha concedido memoria por alguna razón que desconocemos… Yo me imagino, y es una suposición, claro, que está establecido así, aunque la intuyamos, para que no nos hagamos trampa a nosotros mismos, ni al sistema evolutivo, programado o no… De lo que deduzco, con cierta base lógica, que si se conoce nuestro talante y nuestros talentos por ahí, debe ser porque venimos de hacerla, de liarla, por otros lados, y ya se nos tiene sobradamente calados. Es que entonces no tendría ningún sentido. Pero, aparte de la “ficha policial”, cada cual piense por y para sí aquello que le parezca y/o apetezca..

A ver, usted mismo… ¿qué puñetas es vivir?.. y, como seres pensantes y penantes, podemos contestarnos que el hecho en sí mismo de vivir se divide en un manojo de cuestiones: ¿por qué vivimos?, ¿con qué vivimos?, ¿de qué vivimos?, ¿en qué vivimos?, ¿para qué c… vivimos?.. Y todo antes de contestarnos, si podemos, a ¿de dónde venimos?.. Esto es, hermano lobo, vamos a lo que tenemos entre manos ahora, antes de lo que tuvimos, si es que alguna vez fuimos, porque lo que lo fijo es que hay un único y solo presente que dura siempre.

Así que yo me pongo en trance, ¡ fíu..! y me pregunto: a ver, tío, acho, tú por qué puñeta vives?, y está meridianamente claro que, aún ignorándolo, existe un propósito establecido, o mejor pre-establecido, porque a ver si no porqué y para qué… Vale, ¿y con qué venimos?, desde luego “con un pan debajo del brazo”, como decía la abuela, parece que no, ahora, con un pan como una hostia, parece que sí (cada cual habrá que meditar el suyo); ¿de qué vivimos?.. de un Libre Albedrío que nos fue dado para que nos ganemos el pan con el sudor de nuestra frente (lo estamos haciendo con el sudor de nuestra gente). Vale, ¿en qué vivimos?.. en el mejor de los mundos posibles, está claro que nonis, pues, como ese “posible” está condicionado a nosotros, y nosotros no damos para más, pues eche usted cuentas. Y, por fin, ¿para qué vivimos?.. pues puede que para aprender lo que vale un peine, para saber que, al final, vivir y morir es un Volver a Empezar, como la película de Garci, pero que nos hemos empeñado en ignorar para no tener que pensar.

A lo mejor, o a lo peor, es que esas palabras: “por”, “con”, “de”, “en”, “para”, además de ser preposiciones, como nos enseñaron en nuestra temprana escuela, también son proposiciones que se nos enseña en la escuela de la vida… En esto, coñe, hasta la misma semántica acude en nuestra ayuda para que no seamos tarugos: “pre” significa “antes”, antes de la posición en el caso de pre-posición; y “pro”, en el caso de la pro-posición, viene del latín “prodest”, o sea, provecho, utilidad. Esto es, traducido al román paladino, la lengua de Aladino, se nos está diciendo que la posición de antes nos sitúa para la posición de provecho después.

Jesucristo, cuando se las colocaba complicadas a sus seguidores de lo fáciles que eran (no hay nada más difícil que lo que se nos pone fácil) siempre acababa con la misma letanía: “el que tenga oídos para oír, que oiga”, y luego añadía:… porque os lo estoy poniendo a “güevo”, hijos míos… pero esto último nos lo evitó el evangelista de turno, entre otras muchas cosas que nos escamotearon en los primeros conciliábulos, o Concilios.

En muchas películas americanas, nos cuelan la frase: “¿quién dijo que vivir fuera fácil?”.. y parece una excusa impostada, pero es una verdad. ¿Por qué nos hemos creído que es fácil?.. ¿a cuento de qué?.. ¿quién leches nos lo ha prometido?.. Solo nosotros mismos nos engañamos a nosotros mismos, nos creemos las mentiras ajenas convirtiéndolas en propias, y luego, encima, nos negamos a preguntarnos los motivos de las cosas, los casos y sus causas…

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

martes, 25 de julio de 2023

SABER O SENTIR

 

(de Pinterest)

Sentir no es lo mismo que saber. Uno puede aprender muchas cosas en los libros, en la vida, en los viajes, en las escuelas… pero no todas llegan a sentirse. Incluso son parte del acervo cultural de las personas, pero no del sentimiento de cada persona.

Por ejemplo: uno pisa un lugar cargado de historia; toca sus piedras sabias; oye su elocuente silencio; aspira por la piel sensaciones inexplicables… y establece un diálogo sentido, no sabido; intuido, no instruido…

Todo forma parte del conocimiento, sin embargo, lo que se sabe es algo ya aprendido, pero no aprehendido… eso es cercanía, apego, familiaridad, querencia. Solo puede conocerlo quién lo ha saboreado.

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

lunes, 24 de julio de 2023

FLEXIÓN O REFLEXIÓN

 

(de YouTube)

Escribo esta especie de croniquilla un par de días antes de las Elecciones Generales, sin saber el resultado de la “porra” nacional en la que nos hemos polarizado los españoles de mala manera. Así que, cuando salga publicada, sabremos el resultado del pulso, espero y supongo que ya fuera de todo afán cuasi fratricida al que, aparentemente al menos, nos habíamos abandonado en las últimas fechas. La democracia exige respeto a los resultados (sean los que fueran) y los resultados deben respeto a la democracia… En lo uno sin lo otro siempre pierde la democracia.

La semana antes, había leído en El País una entrevista a página completa de Abascal, en la que prometía “incendiar” Cataluña, en sentido figurado, claro, si llegaba a tener responsabilidades de gobierno; poco menos que les iba a mandar el ejército y suspenderles todo lo suspendible como se movieran lo más mínimo… Ignoro si lo dijo como pose electoral, o como advertencia, que yo no llego a captar esas sutilezas en lenguaje ultra.

Días después, esta vez en un medio regional, creo que del intependentista indultado (que no delitoperdonado) catalán de origen murciano, – perdonen que haya olvidado su nombre – recogió unas declaraciones suyas en cuanto a que la estrategia separatista debía de ser votar al PP y a su propio socio Vox, llegado el caso, a fin de provocar de nuevo el levantamiento violento del “poble catalá” otra vez, pues esos partidos fabricarían motivos y circunstancias sobradas para revertir la actual situación, donde el resultado de un referéndum ahora lo pierden con claridad, y por eso no lo plantean, pero en ese caso volverían las tornas a la situación anterior. Se relamía pensando en los disturbios, el tío…

También los del norte, leí a su lehendakari, tener, sujetos pero dispuestos, a sus mastines, ante la expectativa de lo que pudiera acaecer… si bien, eso es cierto, sin imprudentes declaraciones públicas como sus primos los de la barretina. Siempre han sido más listos y menos sacabarrigas los unos que los otros, dicho sea de paso y sin ánimo de ofender.

La verdad es que esta especie de ambiente “pre-bélico” en otrora problemáticos lugares, acojona y preocupa un poco… o un bastante. Les confieso que me dio por recordar cómo el problema irlandés del Ira se solucionó con el acuerdo político-participativo de Belfast como modelo a seguir, si lo que importa de verdad es acabar con las muertes de tantas personas, naturalmente; y empecé a pensar que aquí no hemos aprendido absolutamente nada… o puede, y ojalá que así sea, que me equivoque. Lo cierto y verdad, es que, si nuestros dos partidos mayoritarios tuvieran un mínimo sentido de Estado, formarían un gobierno de coalición para no alimentar a ultras e independentistas.

…Y en esas andaba yo, oigan, cuando se me pasó por la cabeza el permitirme una pequeña experiencia: ir soltando en las redes, 48 horas antes, una microserie – no más de tres o cuatro – mensajes cortos, de hechos propiciados por la misma prensa además, un tanto inclinados a la reflexión más que a la explosión… Una especie de experimento, a ver qué pasaba y/o cómo eran recibidos en plena efervescencia polarizada. Ahora sé el significado pleno de la frase que aconseja no experimentar ni con gaseosa.

Hubo de todo, como en botica, pero los que se manifestaban en contra, la inmensa mayoría de ellos lo hicieron destilando un odio antiguo, viejo y enfermizo, que asustaba… Una amiga se preocupó de verdad; otra prefirió bajar el fuego con la broma de qué tipo de amistades me busco; una tercera analizó con mucho ojo clínico el origen y naturaleza de las invectivas… El ciclón amainó a últimas horas, cuando las cenas amansan a las fieras (permítanme la boutade) y prepararnos el ánimo para el día después, a fin de posar nuestro voto en las urnas, o como les he leído a otros: “partir las urnas con nuestro voto”.

No estoy hablando de levantar la voz (los mensajes no tienen volumen) estoy hablando de los contenidos: tópicos feroces como lanzagranadas, sin reflexión, sin madurar, sin pensar, sin razonar, como una artillería entrenada y con obuses facilitados y preparados, tal era la sensación… “Nunca mais”, le dije a una de esas tres amigas; “no son amistades, son arrecogíos del beaterio de Santa María Egipciaca” bromeé con la otra; “cuando uno se mete en el barro siempre se unta los zapatos”, tranquilicé a la última…

…Pero, aunque se me quedó el ánimo encogido, no me arrepiento de la prueba. He podido constatar, al menos, un par de cosas: que en este país aún andamos lejos de tener una auténtica cultura democrática, pero que, como los ultras rabiosos de nuestros equipos de fútbol, sí que somos “fans” de una cultura partitocrática… Y que se nota mucho, muchísimo, demasiado, esa desaparición programada y paulatina en las aulas, ese secuestro planeado y gradual, de una educación basada en la ética, las humanidades, la filosofía, enfocado a enseñar a ser personas.

Hasta es posible, puede ser, que este mismo análisis postrero, esta reseña final que ustedes están leyendo, aún retuerza colmillos y afile los dientes a los canes guardianes de los cortijeros, domesticados para morder yugulares a cambio de un hueso… porque esa cada vez más nutrida procesión de “la Santa Compaña” es neutra y anodina… Como dice don Alonso Quijano a su fiel Sancho: “¿ladran los perros?, luego cabalgamos”…

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

MIOPÍA

 

(de iStock)

Aquí nos volvemos tontos por atraer y vivir del turismo, por encima de toda consideración, aún despreciando otras posibilidades de riqueza o desarrollo… Incluso a costa del cambio climático y contra todo equilibrio medioambiental. No miramos nada con tal de conseguir cuota.

Y no nos damos cuenta, tan miopes somos, que, dentro de muy pocos años, no va a haber turistas que quieran venir a “los sures” a achicharrarse con nosotros. Somos como topos (voluntarios) que se empecinan en vender toperas.

Solo vemos una salida en nuestra obtusa ceguera: ser los mejores en la oferta turística de sartén y paella, aunque sea aumentando el fuego bajo la misma… “Región de Murcia, la parrilla de San Lorenzo. Venga, y ásese usted mismo”…

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

jueves, 20 de julio de 2023

LA FALSA REALIDAD

 

(de Poematrix)

Tú crees que eres lo que los demás te dicen que eres. El presunto éxito reside en la cantidad o en la calidad de quiénes te lo dicen”… Esta cita que entrecomillo no es nadie conocido, y me van a perdonar que no diga su nombre, pues les va a dar igual. Prefiero que cada cual piense lo que considere conveniente. Aquí no importa el lustre o perifollo del personaje, sino lo cierto o falso de su afirmación. Por eso quiero que nos centremos en el axioma sin dejarnos llevar por la entidad que lo firma.

Los seres humanos estamos habitados por una dimensión a la que conocemos por “mente”, pero sin conocerla realmente. Sin embargo, esa mente sí que nos conoce a nosotros como si nos hubiera parido. De hecho, la mente nos ha formado, o deformado, desde que adquirimos conocimiento de nosotros mismos… Nuestra obligación original era que el hombre (como género, no como sexo) se hiciese con ella para servirse de ella. Sin embargo, apenas si utilizamos un 10% de la misma, por lo que es la mente la que nos utiliza a nosotros en el 90% del resto. El sistema es sencillo, y casi infalible: se limita a hacernos ver lo que queremos ver; hacernos creer lo que queremos creer; hacernos sentir lo que queremos sentir… La estrategia mental se establece a través del ser humano como género al mismo tiempo que como individuo. Actúa a través de todos y cada uno de nosotros, tanto en conjunto – sociedad – como de persona a persona.

Y aquí es donde encaja lo cierto, o lo falso, de la cita con que abro el presente. El pasado del ser humano es gregario, y conserva el espíritu de colmena. Necesitamos la opinión de los demás para anclarnos en nosotros mismos, porque es más cómodo que elaborar una pauta propia. La técnica usada por Göebbels, el ministro de propaganda nazi, de “repite una mentira y la convertirás en verdad” la han utilizado desde tiempo inmemorial todas las naciones, corporaciones, iglesias y confesiones del mundo. Aquí está la cantidad. O si los que lo dicen son aquellos a los que creemos por encima de nosotros, funciona igual. Aquí está la calidad.

Ellos inventan la falsa realidad, y nosotros, al creerla, la re-creamos y la hacemos nuestra… Ellos son los que nos construyen nuestros sistemas de valores; los que dictan nuestros deseos; los que modelan nuestras conciencias; los que dan al dinero el valor que no tiene; los que inventan nuestros pecados; los que establecen nuestras creencias; los que legislan nuestras normas; los que tuercen nuestra ética; los que manipulan nuestra falsa moral; los que mandan en nuestros pensamientos… Ellos viven de todos nosotros esclavizándonos a una realidad embustera que les hemos construido desde nuestras ignorantes existencias.

Nuestro mundo no es de este mundo, pero está en este mundo, al menos mientras nosotros también estemos en él… Existe un “constructo” que aquel nazareno hacía refiriéndose a Él mismo y hacerlo extensivo a sus seguidores. No se trata, en términos místicos, de bajar el cielo a la tierra, sino de subir la tierra al cielo. En verdad, el nivel mental de la gente actual está bajando, mientras el nivel vibracional del planeta está subiendo. Obedece a un plan preestablecido, y consecuente al libre albedrío humano. El cocido, pues, está servido.

Si ahora, a estas alturas del cotarro, tenemos un mundo que es una chapuza, no podemos, ni debemos, echarle la culpa a ningún dios, inventado o no, ni tampoco al que nos inventó a nosotros. Esos dioses no tienen ninguna responsabilidad en el manejo de un mundo para el que se nos concedió pleno carnet de conducirlo. Faltaría más. Lo dije hace un par de días: el quid of the question reside en que el grueso de la humanidad ha creído siempre, y se ha entregado a sí misma, a ser ordeñada por sus amos oligarcas y sumos sacerdotes… y éstos, a través de nuestras mentes, nos han hecho creer lo que a ellos les convenía, para así, ser explotados y dominados por sus clases, a través de sus pagados chacales, casi siempre los políticos, con sus inventadas tradiciones a cuestas.

Desde el Becerro de Oro acá siempre ha sido un más de lo mismo.. Y hemos rehusado complacientemente a nuestro cerebro, y lo hemos entregado en colonización a cambio de un plato de lentejas y un puñado de lentejuelas. Mal que nos pese, lo creamos o no…

Las religiones nos cambian magias y trucos por normas y dogmas, y los gobiernos nos fabrican patrias en nombre de las que matar o que nos maten, cuando dejan de exprimirnos. Le he leído a un muy alto economista que “las personas son dígitos financieros, y la gente es un mercado”. Por supuesto, no es lo que somos, pero es en lo que nos han convertido con nuestra entregada voluntad… Somos puntos, ni siquiera entes, productivos, para las oligarquías económicas que nos manejan, y lo que es peor, aceptamos como verdades intrínsecas todo lo que nos dicen y dictan, y, al aceptarlas, las convertimos en nuestra realidad. Repito lo del comienzo, para ver si la verdad puede abrirse paso por sí sola, por su propio valor, si es que sabemos reconocérselo, claro…

El producto que más les hemos “comprado” es la creencia de nuestro derecho al pan y circo; y el que mejor nos han “vendido” es el miedo. A través del miedo nos controlan… y nos descontrolan; nos hacen ir por aquí o por allá; querer esto o lo otro; plantearnos nuestra vida planeada por otros. Nos acotan y agotan la existencia por un caramelo que lanzan de vez en cuando, y se cuidan mucho de mantenernos en la más absoluta oscuridad e ignorancia…

Guerras, crisis, epidemias, carestías… “Nunca faltará una calamidad a tiempo en la mesa de la burguesía trabajadora, pues es lo que la mantiene como zángano que piensa a través de su reina”. Y, como al principio también, tampoco diré de quién es, o de dónde procede, este último axioma, pero si aún les quedan sesos y redaños para pensar por sí mismos, verán que es lo que más se parece a la realidad que nos hemos fabricado.

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com

miércoles, 19 de julio de 2023

PENSAR ANTES DE VOTAR

 

(de El País)

Existe una derecha europeísta, democrática en esencia, no en presencia; la del pacto social; la abierta al mundo, a sus etnias y culturas; la del respeto y educación; la del consenso, el diálogo y enemiga de toda censura; una derecha libre que pregona libertad..

Y hay una derecha que se deja dominar por sus ultras, por xenófobos y fascistas; una derecha aliada al bulo y al insulto; amiga de extremistas y enemiga de la libre expresión; acotadora de derechos y aprovechadora de la democracia maniatada a sus pies…

¿Cuál de ambas cree usted que le pide su voto el domingo?.. Deje pensar a su conciencia y vote en libertad, pues seremos los únicos responsables de lo que nos venga…

Miguel Galindo Sánchez / www.escriburgo.com / miguel@galindofi.com