PARAÍSOS FISCALES

Al principio fue el paraíso a secas. Como no había que trabajar para comer, no había dinero, y al no haber dinero, tampoco había impuestos. Creced y multiplicaos, había dicho el Yayo, eso sí, no piquéis entre comidas y, sobretodo, no me comáis del manzano, que lo he fumigao… Esa era la única imposición. Por lo demás, Park Paradise Resort está a vuestra disposición y servicio, no me andéis con gilipolleces y la caguéis… Pero, como no podemos tener  las manos quietas, pues nada, la jodió la nenica, nos jodió la bicha y la y nos jodimos todos. Así que luego, pues hale, a ganarse el chusco con el sudor de nuestro sobaco, para poder trincar la pasta con que pagar al panadero…. Y ya se sabe que si uno cobra por algo, paga impuestos por todo… Y de ahí los otros paraísos: los fiscales.

               En el 2.009 de nuestra era, el FMI calculó que los paraísos fiscales escondían la cuarta parte de la riqueza mundial. Hoy se calcula que ya alcanza la tercera parte. O sea, cuánto más avanza la crisis, más crece el dinero evadido. Naturalmente, no se va a declarar todo lo que se ha robado, todo lo que se “ha perdido”, como falso enunciado, pues nada se pierde, solo cambia de sitio. Se quita de donde estaba y se oculta donde las cuevas de Alí Babá. Eso mismo, y no otra cosa, son los paraísos fiscales. Pero no son los 40 ladrones. Son cientos, miles, cientos de miles de encubridores, y de (políticos) colaboradores, que hacen leyes – cortas – que condenan, junto a otras – largas – que permiten. Hipócritas consentidores que proclaman lo contrario de lo que hacen…
                Hay muchos paraísos para el dinero sucio, traidor y cobarde. Hay  muchas islas: Jersey, Shelleys,  Malta, Belice, Caimán, Trinidad -Tobago… Qué mejor sitio para aislar las perras que una isla… O, si no, el centro de una grande y libre, como el centro financiero de Inglaterra, la city londinense, una de las mayores lavamierdas del mundo. También están camuflados continentalmente en diminutos estados, como Leichtenstein, Luxemburgo, Mónaco, Vaticano… o en otros menos diminutos como la neutral Suiza de las vacas lecheras y el abuelo de Heidi. O incluso en Delaware, uno de los unidos de América.
                España está muy bien surtida: Andorra, al norte, y Gibraltar, al sur. Para que nuestros magnates y mangantes, que son la tira y la madre, y de las mejores familias, lo tengan fácil y no se molesten mucho. Se lo ponemos como la bandeja en misa… “Yo no sé nada, para eso, mi asesor”, como messi-ánica jaculatoria. Que nuestro país esté tan bien “situado” no es casualidad, si no causalidad. Somos una nación de naciones de evasores como pocas del planeta tierra. Por eso los chiringuitos se han instalado cerca. Hay mucha, mucha clientela que atender: políticos y empresarios corruptos, banqueros sin escrúpulos, artistas, deportistas, famosos y famosillos, o simplemente acaudalados… Aquí, el lema del escudo de armas es “tonto el último”, y se tiene por privilegio hacerlo, y se le envidia y se ensalza al que puede y obra. Las estamos pasando canutas y encima jaleamos y aplaudimos al que se las lleva. Merluzos integrales es lo que somos todos…
                Ahora resulta que los de Obama están mosqueados por el silencio que, desde el 11-S, se detecta en el movimiento de dinero que financia al terrorismo… Es increíble, ¿qué esperaban?.. ¿Que solo los mercaderes de armas, y de la droga, y de la trata de blancas, y del crimen organizado, y de la mafia, y de todos los hijoputas, sinvergüenzas, canallas y criminales del mundo iban a tener derecho a esconder su dinero?.. Pues no. A este selecto club, al que tampoco faltan algunas testas coronadas y reales cortes, se les ha unido la casta terrorista. El dinero tiene todo el mismo color, y no huele, ni se le pregunta el nombre. Por eso se le coge y se le acoge sin mayores miramientos.

                … Y cuando están todos junticos, todos igualicos en un sitio, tanto dá de dónde vengan, dá gloria verlos, y sentirlos… Es la gloria del más preciado y apreciado edén, la del jardín del bien y del mal, aunque bastante más de lo segundo que de lo primero… La gloria maldita, vamos. Los malditos paraísos fiscales.- No veo el momento que llegue el de la espada flamígera y le arrime candela a todas las cuentas, a todas las cajas de seguridad, a todos los depósitos, y bancos, y banqueros, y tenderos, y que arda el monario entero… Que menudo negocio se montó la jodida serpiente, y menuda camada que parió

Comentarios

Entradas populares de este blog

ANTONIO, EL CURA.

RESPONSABILIDADES

PATRIAS

ASÍ LO CREO YO...

HAZ LO QUE DEBAS

EL DOGMA POLÍTICO

¿CON QUÉ DERECHO..?